GABRIELA GERVASONI
Publicado en relatos el 25 de Julio, 2012, 20:47 por MScalona
La persistencia de la mirada - -
Leyendo en un parque termal, con un cielo transparente de tan azul, el horizonte apoyado sobre la ruta 14 no es más que una escenografía. Todo es escenográfico y está ahí sólo para ser contado. El mundo no es nada hasta que alguien lo mira, lo siente y subsiste cuando lo toma la palabra. Así persiste la mirada. Papá, cuándo haga calor, ¿vamos a venir a la pileta?, pregunta una nena que nos estuvo espiando mientras Sebastián y yo nos besábamos. ¿A qué hora se puede tomar mate?, le había preguntado yo. El me dijo que de cuatro a siete y me empezó a besar despacito. La nena salió corriendo como un pájaro cuando me incorporé para tomar un mate (ya eran más de las cuatro). Todos los que están ahí, actuando en silencio mientras garabateo palabras para escribir alguna vez este relato, podrían ser personajes. Hombre gordo, chica joven de piernas chuecas, viejita con bastón de madera, chico de la mano de su amigovia; mujer madura bien conservada, hombre maduro mal conservado, bebé sobre una toalla que parece alfombra mágica. Me gusta el juego de mirarlos a contraluz, coloreados por los arco iris que arma el sol en mi pelo. Busco a Sebastián en la pileta. Es único, pero desde donde estoy, detrás de una lona transparente, podría ser cualquiera. Le gusta mucho estar en el agua, creo que tanto como a la nena que nos estuvo espiando. Ahora escucho hablar a los personajes que, con simulada indiferencia, se confiesan para mí (¿y para otros?). Cuando Sebastián sale del agua se pone una bata azul y empieza a diferenciarse del resto. El sol perdió de nuevo y yo quiero escribirlo. -
Gabi Gervasoni |