TAMBORILES
Publicado en Aguafuerte el 1 de Noviembre, 2005, 10:04 por pachinjavkin
Entrepisos. Es una consecuencia de la falta de espacio. No solo son estrechos los márgenes del pensamiento, la política posible o los mediocampos. Con los bares pasa lo mismo, principalmente en las ciudades. Esos salones largos, donde desde la entrada la barra se divisaba lejos, que tocaban la esquina y el centro de manzana ya no existen más. Los que quedan dividen el espacio, incorporan rotisería y delivery, y todo tipo de trucos para sobrevivir. Ella en el entrepiso y nosotros abajo, con vista a su espalda y al prometedor inicio del pantalón. Una espalda de mapa, una suerte de sudamérica pintada con pelo lacio y negro. Mil cosas se podían imaginar, treparse, recorrer, contemplar. Una vocación para las manos, …para los labios es casi un destino…, decía Benedetti, y valía para ella, ni desnuda ni en lo oscuro. No es casualidad. No, ni lo de lo entrepisos ni lo de la mina, no ves que no podés pensar en otra cosa. Lo de Benedetti, digo, lo de Uruguay. Treinta años los tipos. De a poquito, persona por persona. Se convence se cambia, se cambia se convence. Un general de los buenos, un médico de barrio, un gordo con pelotas y corazón. Y se hicieron millones los tipos. Eso es un país. Da envidia. El agua de todos. La universidad de la república. El frente amplio. Nosotros nos portamos mal, hace mucho, pero…Artigas tenía razón, pero los caudillos eran cambiantes, desconfiados, no muy preparados. Mucho coraje, pero no tanta claridad. Pero tenía razón, ese había leído a Hamilton, no era federal de pico. Seríamos otra cosa. No la Nueva York de argentina, como dice el gobernador. No tanto, pero otra cosa seguro. En mi país brillará yo lo sé, el sol del pueblo arderá nuevamente alumbrando mi tierra. Canta Zitarroza. No se escucha en las geografías estrechas. Dudo que llegue al entrepiso. Pero algo de eso bailamos todos viendo la 18 de julio invadida y feliz.. La morocha no conoce la canción y seguramente ni siquiera a Don Alfredo. Pero la espalda parece un continente. Convoca, anima, moviliza. Habrá que subir la escalera y decírselo en la cara. |